The Heart of Millionaire cap.24

—¿Aquí? —repitió Brandi. —¿Qué quieres decir con que está aquí?
Miley miró por encima de su hombro, hacia la puerta de su casa, que estaba cerrada. Había visto a su hermana pasar por delante y había ido derecha a hablar con ella.
—Quiero decir que está aquí, en mi casa. Con los niños.
Y ya llevaba tres días. Miley había conseguido evitar a Brandi con la excusa de que estaba ocupada, pero sabía que, antes o después, su hermana mayor iría a verla.
—¿Estás loca? ¿En qué estás pensando, Miley? ¿Por qué le has invitado a venir?, te he dicho que busques a alguien mas.
—Yo no le he invitado —protestó ella, luego se encogió de hombros. —Ha venido solo. Y no pienso buscar a nadie mas
Brandi la miró con el ceño fruncido.
—¿Estás acostándote con él?
 sintió decepción. No, no se estaba acostando con él, pero soñaba con él todas las noches. Y cuando se despertaba por las mañanas se sentía vacía.
—No, santa Brandi, defensora de la moral, no me estoy acostando con él. Lleva un par de noches durmiendo en el sofá y...
—¿Un par de noches?
Miley hizo una mueca, levantó la vista y saludó a su vecina, que había dejado de podar los rosales para mirar a Brandi, sorprendida.
—Buenos días, señora Logan.
La señora movió la cabeza y siguió trabajando en su jardín. Miley miró a un lado y otro de la calle flanqueada por árboles que daban sombra a las extensiones de césped bien cortado. Se oía botar un balón de baloncesto, un perro ladrando frenéticamente y las ruedas de un monopatín sobre el asfalto. Era otro día más de verano. Y Miley se preguntó cuántos de sus vecinos estarían disfrutando del sermón que le estaba echando su hermana. Miró a ésta con dureza, levantó las cejas y esperó.
Brandi entendió su gesto y bajó la voz.
—Lo siento, lo siento. Pero no puedo creer que Nick Falco lleve dos noches aquí y no me lo hayas dicho.
—¡No me digas! Evidentemente, si he guardado el secreto, ha sido porque pensaba que no lo entenderías, pero ya veo que estaba equivocada.
—Muy graciosa.
Miley suspiró y entrelazó su brazo con el de su hermana. Pasase lo que pasase, siempre formaban un equipo. Desde hacía cinco años sólo se tenían la una a la otra, ya que sus padres habían muerto en un accidente de coche. Y no iba a perder a su hermana por un hombre que no la quería.
—Bran —dijo, intentando mantenerse tranquila a pesar del torbellino de emociones que tenía en su interior, —ha venido a conocer a los niños. Son sus hijos, ¿recuerdas? No estamos juntos y créeme si te digo que estoy siendo cauta.
Brandi no parecía del todo convencida, pero eso se debía a su falta de fe en los hombres. Toda la culpa la tenía el cerdo de Darius Stone, que la había dejado tirada, sin miramientos.


—Me parece una mala idea —comentó por fin.
—No se quedará mucho tiempo.
—Los hombres como él no necesitan mucho tiempo.
—Brandi...
—¿Estás segura de que no va a quedarse?
—¿Por qué iba a hacerlo?
—Se me ocurren al menos tres razones: Jacob, Cooper y, ah, sí, tú. Así que te lo vuelvo a preguntar. ¿Estás segura de que no va a quedarse?
No, no lo estaba. De hecho, había pensado que se marcharía mucho antes, pero por el momento no había hecho ningún ademán.
¿Seguía allí sólo por sus hijos?
¿O sentía también algo por ella?
No podía permitirse el darle vueltas a esas cosas. Si no, lo pasaría muy mal cuando se marchase.
—Mira si te mira con alguien mas tal vez se marche.
—Pero...
—Miley... —la llamó Nick desde el porche, pero se detuvo al ver que estaba hablando con Brandi. —Oh, lo siento.
Ella se obligó a sonreír, no le quedaba otra opción.
—No pasa nada, Nick. Esta es mi hermana, Brandi.
Ninguno de los dos habló y Miley le dio a Brandi un codazo.
—Vale, vale —murmuró, luego levantó la voz y dijo a regañadientes: —Encantada de conocerte.
—Igualmente.
—Bueno, qué ocasión tan especial —murmuró Miley. —Entra, Brandi —así su hermana se daría cuenta de que no tenía nada de qué preocuparse, de que Nick no estaba interesado por ella y no le iba a hacer daño. —Ven a ver a los niños. Haré un café.
Sin dejar de mirar a Nick, Brandi sacudió la cabeza.
—No sé si...
—He ido a comprar unos donuts hace un rato —comentó Nick.
—¿Está intentando sobornarme? —susurró ella.
Miley dejó escapar una risotada.
—Por Dios, Brandi, intenta ser agradable.
Pero Miley se sintió como si la hubiesen dejado en campo enemigo con sólo una navaja en el bolsillo.

Holaaa se que este dia prometi Jemi y no se procupen lo habra pero decidi subir este capi antes de subir una capi qe me esta pidiendo MAYI no lo tenia planeado pero lo subire a Nick celoso jajaja no sera asi tan genial pero mañana lo subo... BESOS!!