A New Woman cap.11

Zac llegó al picnic con aspecto de ejecutivo triunfador. En parte, Joe envidiaba a su hermano pequeño. Pero, al tener a Demi a su lado y también a Zac, se sintió de maravilla.
-Parecéis muy felices los dos -comentó Zac-. ¿Te ha convencido Joe al fin de que te quedes?
Demi negó con la cabeza y Joe se dio cuenta de que todavía
tenía que ocuparse de muchas cosas antes de poder recuperar a su pequeña Demi.
-Vayamos a mi despacho de la casa a llamar a Nick-propuso
Joe a su hermano.
-¿Ahora mismo? -dijo Zac.
-Sí. No he tenido oportunidad de hablar con él hoy y la prensa no deja de llamar, preguntando qué noticias tenemos.
-El senador Cavanaugh también está esperando respuestas.
Hasta que las tenga, no nos ayudará a conseguir una ampliación de la refinería, por mucho que vayas a casarte con su hija.
Joe se sintió impresionado por su hermano menor. No se
parecía físicamente a su padre y, sin embargo, tenía su mismo vigor. Además, a Zac se le daba bien tratar con los políticos, mientras que él sólo sabía tratar con la gente de la refinería.
-¿Por qué me estás mirando así? -preguntó Zac.
-Estaba preguntándome de dónde has sacado esa habilidad tuya para la política.
Zac se encogió de hombros.
-Supongo que de mamá.
-Quizá. Siempre me olvido de ella -replicó Joe
Alicia Brody lo había hecho lo mejor que había podido. Y Joe sabía que, cuando había dejado a su marido, había sido porque no había podido soportar más su rudeza. Hacía mucho tiempo que él había aprendido a arrinconar sus sentimientos de abandono.
-¿Sabes? Entiendo a mamá, comprendo por qué me abandonó -comentó Joe mientras los dos hermanos entraban en la casa-. Yo soy la viva imagen de nuestro padre. Pero nunca entendí por qué te abandonó a ti.
Zac se frotó la nuca y se dirigió al mueble bar del salón.
-Creo que nuestra madre no quería que ninguno de los dos
estuviéramos solos. Siempre he pensado que ella sabía que, si yo no me quedaba, tú no lo soportarías.
A Joe no le gustó cómo sonó aquello. El siempre se había
considerado el hermano protector, quien se había encargado de cuidar a Zac.
-¿De veras?
-Bueno, no lo sé. No soy mujer y, si te soy sincero, no entiendo a las mujeres -admitió Zac.
Joe se rió. Su propia situación en relación a las mujeres ya era bastante complicada. Su compromiso no había hecho su vida más fácil, como había esperado. Aunque había decidido ser el hombre que Nessa se merecía, no podía dejar de besar a Demi.
-Hablando de mujeres, le he comprado un collar a Nessa. ¿Crees que es la clase de mujer a la que le gustaría recibir el regalo en público? -preguntó Joe.
Zac se sirvió dos dedos de whisky en un vaso grande y lo apuró de un trago.
-No.
-No estaba seguro. Supongo que es mejor que se lo dé cuando la lleve a casa más tarde. Me alegro de que vaya a venir hoy.
-Su padre se lo pidió. Creo que el senador quiere saber cómo somos en nuestra propia casa.
-Cavanaugh sabe cómo somos. Texanos, como él. Y no
deberíamos olvidar eso.
Zac sirvió un vaso de whisky para Joe y se lo tendió.
-Por los texanos -brindó Zac.
Joe brindó con su hermano y se bebió el vaso de un trago. Le gustó sentir cómo la bebida le quemaba la garganta.
La banda empezó a tocar en el exterior.
-Llamemos ya a Nick y zanjemos ese asunto para poder
disfrutar de la fiesta.
-Buena idea.
Joe caminó por el pasillo hacia su estudio. El cuarto estaba
decorado en tonos oscuros de marrón y cuero. El mismo había elegido los muebles, en vez de dejárselo a un diseñador de interiores. Había tenido muy claro el aspecto que quería que tuviera su despacho.
Había una fotografía en blanco y negro en la pared y un retrato al óleo de Zac y él, hecho para conmemorar el día en que habían abierto su primer pozo.
-¿Recuerdas ese día? -preguntó Zac.
-Claro que sí. Pienso en él a menudo. Fue cuando supe que tú y yo íbamos a lograrlo.
-Yo siempre supe que lo conseguiríamos -aseguró Zac-. Ninguno de los dos sabe rendirse.
-Eso es verdad -repuso Joe y marcó el número de Nick con el altavoz del teléfono activado.
-Nick al habla -respondió el jefe de seguridad.
-Somos Joe y Zac.
-Feliz Cuatro de Julio. Supongo que llamáis para saber cómo va la investigación.
A Joe le gustaba que Nick siempre fuera directo al grano. Era uno de sus mejores amigos y el tipo de hombre con el que sabía que podía contar.
-Eso es.
-Me temo que no tengo muchas novedades.
Siguen diciendo que ha sido provocado y han encontrado dónde empezó el incendio, pero ahora tienen que investigar qué acelerante de combustión se empleó para hacer que se extendiera el fuego. Una vez que lo descubran, empezarán a averiguar dónde fue vendido.
-¿Cuánto tiempo crees que tardarán? -inquirió Joe.
-¿Quién sabe? Pero sigo en contacto con ellos a diario y te
aseguro que están esforzándose mucho en este caso.
Nick les comunicó un par de detalles más y, antes de colgar, Joe y él quedaron en tomar algo juntos hacia finales de semana.
-¿Vas a estar en la ciudad la semana que viene? -preguntó Joe a su hermano.
-Si consigo que el senador Cavanaugh vuelva a ponerse de
nuestro lado, sí. Si no, tendré que volver a Washington D. C. Es un momento crítico en nuestros tratos con él.
Joe asintió.
-Gracias por ocuparte de esto, hermano.
-También es mi empresa y tengo tantos deseos de que triunfe como tú -repuso Zac.
Joe no lo dudaba. Cuando su padre había muerto, los dos
hermanos se habían jurado dar prioridad a la compañía y
convertirla en la mejor refinería del mundo.
Habían sufrido algunos altibajos con los huracanes y con las
huelgas de trabajadores, pero Zack y él juntos habían superado cualquier obstáculo hasta el momento. Lo del incendio provocado era sólo una complicación... nada que los dos no pudieran solucionar.

Hola chicas dejandoles aqi un capi asi de carrerita 

gracias por su comentarios las QIero♥