domingo, 17 de junio de 2012

A New Woman cap.10



-¿Qué necesitas? -preguntó Demi, intentando sonar distante y sofisticada. Pero era muy difícil porque, en realidad, se sentía como una niña pequeña. ¿Por qué dejaba que Lance la influyera tanto?
-Quería disculparme por mi comportamiento de antes.
-Creo que ya lo hemos hablado -repuso Demi. Lo último que
quería era revivir el beso de nuevo. Para ella, había sido increíble y la respuesta a sus más íntimas fantasías.
-No sé por qué nos está pasando esto, Demi -insistió Joe-. Pero yo no voy a poder ignorarlo. Eres...
-No digas nada más. Tú vas a casarte y yo voy a dejar este
trabajo.
-¿Por qué te vas?
Demi lo miró y consideró la posibilidad de decirle la verdad. Pero, en cierto sentido, pensó que él no iba a reaccionar bien si le con fiaba que se iba porque lo amaba y porque se le rompería el corazón en mil pedazos si lo veía casado con otra.
-Me voy porque no puedo seguir trabajando para ti.
Aquello no era mentira, pensó Demi. Por suerte, él pareció
aceptarlo como respuesta.

Demi pasó el resto del día haciendo su trabajo y se dio cuenta de que todos los hombres de la oficina empezaban a fijarse en ella.
Debió haberle servido para albergar esperanzas de enamorarse de otro hombre, pero no fue así. Sólo se sentía triste porque el hombre que le había hecho cambiar parecía ignorarla de nuevo, a pesar de haberla besado.
La fiesta del Cuatro de Julio se celebraba en la finca de Joe en Somerset, junto al lago. Había una zona para jugar al voleibol, deporte que él practicaba desde el instituto. Más tarde, jugarían el partido anual entre directivos y empleados.
Los encargados del catering habían estado trabajando desde
antes del amanecer y el aire estaba impregnado de deliciosos aromas. Había un pinchadiscos poniendo música en una carpa y todo estaba decorado en los colores de la bandera de Estados Unidos: rojo, blanco y azul.
Joe vio a Demi nada más llegar a la zona de la fiesta.
-Feliz Cuatro de Julio.
-Igualmente. ¿Qué quieres que haga?
-Bueno, Zac va a llegar tarde, así que puedes ayudarme a
repartir las etiquetas con los nombres y a dar la bienvenida a los que van llegando.
Desde el primer año que habían celebrado la fiesta, se había convertido en una costumbre el que saludaran en persona a todos los presentes. Zac, él y Demi.
-No puedo creer que sea el último año que vas a estar aquí -dijo él.
Joe había dejado de intentar convencerla de que se quedara.
Demi había asegurado que no iba a cambiar de idea y, como él pretendía comportarse como un novio decente con Nessa, había pensado que no debía intentar retener a la mujer con la que tenía fantasías todas las noches.
-Yo tampoco. Voy a echarlo de menos. Pero tendrás una nueva anfitriona este año -señaló Demi.
-Sí. Creo que Nessa quiere hablar contigo para que le cuentes todos los detalles del evento y ponerse al día.
Demi se mordió el labio inferior pero asintió.
-La invitaré a la reunión que celebraré después de la fiesta con el equipo de planificación. Así, además, podrá conocer a la gente.
-Gracias. ¿Vas a quedarte en Somerset esta noche?
-No lo sé. Mis padres se han ido a Frisco para visitar a mi
hermano y su familia.
-No ves a tus padres mucho, ¿no?
-No estamos muy unidos -admitió ella-. Ellos están ocupados con su vida y yo estoy ocupada con el trabajo. Pero, si los necesitara, podría contar con ellos.
Joe había aprendido de su propia experiencia que sólo podía
contar con la familia que él mismo había creado. Su hermano y Nick formaban parte de esa familia.
Joe había hablado con Nick el día anterior para preguntarle
por la investigación, pero no había muchas noticias.
-¿Sabes algo de Zac? Cuando hablé con él ayer, me dijo que
llegaría tarde. Pero vamos a necesitarle para anunciar los
premios anuales -comentó Demi.
-Sí, es verdad -repuso Joe-. ¿Estás lista para jugar al voleibol en mi equipo este año? -propuso.
-Oh, no lo sé.
-Todos los años dices que el siguiente. Pero éste es tu último año...
-¿Para qué quieres que juegue? -preguntó ella-. No estoy muy en forma.
-Sólo para divertirnos. Vamos, Demi-pidió Joe. Quería pasar
todo el tiempo posible con ella. Al menos, antes de que llegara Nessa. Se dio cuenta de que debía esforzarse en no olvidar a Nessa.
Sólo podía pensar en Demi.
-De acuerdo, jugaré. Pero sólo si llega a tiempo Zac, porque uno de nosotros tiene que quedarse en la mesa de bienvenida.
-Llegará -aseguró Joe-. ¿Qué regalos hay este año en la bolsa de bienvenida?
-Una camiseta y otros recuerdos de la compañía. Y pistolas de agua para los niños.
-¿Por qué sólo para los niños? -preguntó Joe, sonriendo.
-Porque el año pasado, Zac y tú no parasteis de disparar a
todos.
-¿Sigues enfadada porque te sorprendimos en un fuego cruzado?
-Claro que no.
Joe recordó el aspecto que Demi había tenido con una camiseta demasiado grande empapada y pegada a los pechos. Lo cierto era que había sido entonces cuando había reparado en que su secretaria era más atractiva de lo que parecía. Sin embargo, ella había parecido tan disgustada, que él se había quitado su propia camiseta y se la había ofrecido. Demi la había aceptado y se había ido de la fiesta minutos después.
-¿Qué estás pensando? -quiso saber ella.
-En el aspecto que tenías con la camiseta empapada el año
pasado.
Demi se sonrojó.
-Bueno, pues no lo pienses. No debes pensar en cosas como ésa. Recuerda que dijiste que no querías caer más en la tentación.
-Creo que no ha sido una decisión muy acertada, Demi.
-¿Por qué no?
Joe echó un rápido vistazo a su alrededor. Era todavía
temprano y no había llegado nadie, a excepción del equipo que estaba preparando la fiesta. Le acarició el rostro a Demi y la miró a los ojos.
-No puedo ignorar cómo me haces sentir.
-Por favor, no -rogó ella, mordiéndose el labio inferior.
-¿No qué?
Demi se apartó.
-No digas esas cosas. Porque puedo creerlas y hacer algo
estúpido, como besarte. Luego, cambiarás de opinión y me
volveré a sentir como una tonta.
-No te sientas tonta -dijo Joe. Se inclinó y la besó. Llevaba dos días esperando para hacerlo, desde que había visto a Logan apoyado en su escritorio, hablando con ella.
Joe quería asegurarse de que Demi supiera que él era el único hombre al que debía besar.
Sus labios sabían tan bien... Joe tuvo que reconocer que la
deseaba. Con Nessa o sin Nessa, no podía seguir manteniéndose alejado de Demi.

2 comentarios:

  1. wow si sintio celos joe de logan
    estuvo genial el maraton...

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  2. dios me encanta como joe es tan vulnerable ante demi siguela pronto plisss

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