Pero no murió. Una hora más tarde, estaban en la suite del piso más alto de uno de los mejores hoteles de Reno. Joe cerró la puerta con llave y se volvió para mirarla.
Lo que vio en su expresión despertó en ella esa sensación de debilidad que había sentido otras veces, y agradeció volver a sentirse así.
Fue retrocediendo paso a paso por el recibidor, hasta el salón de la suite. Joe dio tantos pasos como ella.
-El conserje se ha sorprendido mucho al verte.
El se encogió de hombros.
-Gajes del oficio.
-Habrá periodistas acampados en la puerta de la suite dentro de media hora.
-¿Y qué? ¿No has sido tú precisamente la que dijo que íbamos a mantenerlos informados?
-No estoy segura. Ha ocurrido todo tan deprisa.
Sintió que había chocado con uno de los divanes del salón, y se sentó.
-No te hagas la inocente conmigo. Sé muy bien qué es lo que dijiste.
Demi se cruzó de piernas, sintiendo deslizarse una sobre la otra con las medias.
-No ha sido tan difícil hablar con los periodistas, una vez que conseguí relajarme un poco.
-Yo diría que te relajaste un montón.
-¿Ah, si?
-Quién te ha cortado el pelo?
-Selena.
-¿Y el trajecito de chaqueta y el maquillaje?
-Todo Selena. Primero solucionamos nuestros problemas y después me dio unos cuantos consejos. Tiene un gusto excelente.
-Estás preciosa.
-Gracias.
-¿Lo has dicho de verdad, Demi? Y cómo me preguntes ¿qué?, te estrangulo.
-De verdad.
-Entonces, dilo otra vez, sólo para mí.
-Te Amo, Joe.
Joe se quedó callado y después, la cogió de la mano y le hizo levantarse.
-Me gusta cómo estás con esta ropa -dijo, mientras le desabrochaba la chaqueta-, pero también me gustas en vaqueros y con botas.
-Me alegro.
-Pero como más me gustas, es desnuda.
Le quitó la chaqueta y la echó sobre una silla y después le hizo volverse para bajar lentamente la cremallera del vestido. Acariciándole los hombros, lo hizo caer a sus pies. Demi sacó los pies y se quitó los zapatos. Lo único que le quedaba puesto eran las braguitas y la camisola que Selena le había hecho comprar. No llevaba sujetador.
-Yo también te amo -susurró Joe, y Demi sonrió.
Lentamente fue subiéndole el jersey hasta que se lo sacó por los brazos.
-Creo que lo sabía, pero me encanta oírtelo decir.
-¿Quieres que te lo diga otra vez?
Demi le acarició el pecho.
-Sí. Dímelo otra vez -dijo, y apoyó la cabeza sobre su pecho-. No dejes de decírmelo nunca.
Joe la abrazó.
-Lo haré si te casas conmigo.
-Sí, Joe. Sí.
Entonces él la cogió en brazos y la llevó hasta la enorme cama de la otra habitación.
-Joe, no he traído nada -dijo Demi de pronto. Lo había olvidado.
El se tumbó junto a ella y perezosamente le bajó un tirante de la camisola para besarla en el hombro.
-No lo hicimos mal con Alexa.
Demi le empujó por el pecho hasta poder mirarlo a los ojos.
-¿Qué estás diciendo?
-Pues estoy diciendo que podríamos tener nosotros un niño. La verdad es que he hecho montones de planes para el futuro.
Demi le apartó un mechón de pelo de la cara.
-Cuéntamelos.
El la besó en la punta de la nariz y deslizó una mano bajo la camisola hasta llegar a uno de sus pechos. Demi suspiró.
-Cuéntamelos -repitió, pero con una voz algo más ahogada que antes.
-De acuerdo. Quiero que vayas a la universidad, tal y como deberías haber hecho hace años. Quiero que estudies ingeniería.
-Joe...
-Y quiero que tengamos hijos. Quiero educar a nuestros hijos. Y puede que también a otros que no lo sean; niños a los que querremos como si fueran nuestros también.
-Adoptados, ¿quieres decir?
El asintió.
-Tuve una niñez tan mala que me gustaría poder darles a otros niños la oportunidad de evitarlo. ¿Qué te parecería, adoptar un niño o dos?
-No lo sé. Nunca lo había pensado.
-Entre los dos, podríamos hacerlo, igual que pudimos con Alexa.
Demi estaba riendo aunque tenía los ojos llenos de lágrimas.
-Es una locura.
-¿Qué es una locura?
-Yo antes defendía mi intimidad a capa y espada, y creía que mi libertad era lo más importante en la vida para mí. Pero ahora, desde que tú apareciste, se me ocurre decirle a un montón de periodistas que te amo, y empiezo a pensar que sería una idea estupenda hacer ingeniería en la universidad y criar a un montón de niños.
Bajo la camisola, su mano seguía moviéndose y Demi suspiró.
-Vamos a conseguirlo, Demi. Vamos a tener una vida maravillosa -susurró él, antes de besarla.
Demi no dijo nada. No necesitaban palabras. Desde que Joe Jonas había vuelto a Red Dog City, el mundo se había convertido en un lugar en el que podía ocurrir cualquier cosa. Un lugar donde incluso la solitaria y poco femenina Demi Lovato podía encontrar todo el amor y la felicidad que una vez pasó de largo.
FIN
niñas aki esta el fin de esta nove que ame tanto se los de dico a todas aquellas niñas bellas que comentaron como Mari♥, Mariina, Vanesa Gomez, Male, GIGI, lovatic forever y a todas las demas las quieroo!!!
PD. pronto subire un argumento JEMI no puedo vivir sin JEMI ♥
Jooooo me encantó!!!!!
ResponderEliminarAmbos finales fueron fascinantes, te juro que me encantaron :)
Sube pronto capis de tus otras noves, que por cierto, tambien amo xDD
Prometo comentar seguido y dejar de ser una lectora fantasma :B
Bue... cúidate, besis, bye c:
Me encantooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo el final espero que subas pronto saludos
ResponderEliminarpor fin demiii se digno a decirle que ama joe...
ResponderEliminarme encanto el finnn---
me quede sin lapton por un buen tiempo me comparan otra y me quedo sin internet ? y cuando ya todo esta solucionado me encuentro con el final de la nove jajaj lloro me encato y espero que pronto subas otra de jemi por que amo esa parejaaaa son tan hermosos *.*
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