Miley's Little Secret cap.2

Al día siguiente, domingo, volvió a ocurrir.
Y precisamente en la iglesia, lo que hizo que Miley se sintiera más
cobarde y culpable que nunca.
En la iglesia, el último lugar donde esperaba encontrárselo. El Nick Miller que ella recordaba nunca iba a la iglesia.
Sonaba música de órgano y la gente se colocaba en los distintos
bancos. A la derecha de Miley estaban Jerry, su madre, Tish y su padre, Billy, que saludaban a los amigos y vecinos que pasaban por allí camino de sus asientos.
Hannah estaba a la izquierda de Miley, con Liam al otro lado. Su cabello le caía en ondas suaves hasta los hombros y su rostro parecía resplandecer de felicidad. Liam y ella se daban la mano y se miraban continuamente con adoración.
Miley no lo habría creído si no lo hubiera visto con sus propios ojos,
pero era evidente que Hannah, por primera vez en sus 28 años, estaba enamorada. Desde su capricho por Nick en el instituto, no había dedicado tantas sonrisas brillantes y miradas encantadoras a un hombre.
Y con Nick había habido tantas muecas y enfurruñamientos como
sonrisas.
Con Liam, todo eran ojos brillantes y sonrisas felices. Liam Hemsworth era, sin duda alguna, el hombre que llevaba toda su vida esperando.
El prometido de Hannah era un hombre grande y fuerte de treinta y
cinco años que curiosamente se parecía mucho a Billy Cyrus. Los
dos tenían una sonrisa abierta y rápida de vendedor. Los dos reían a
carcajadas y con fuerza y a veces hacían que uno se preguntara si oían algo de lo que decía.
—Es igual que papá —le había susurrado Miley a su hermana el día
anterior, después de que le presentaran al jovial Liam.
—Igualito —repuso Hannah, que parecía encantada.
Miley no lo entendía. ¿Cómo era posible que su hermana se enamorara de un hombre que tanto se parecía a su padre?
Pero, por otra parte, Hannah no tenía los problemas con su padre que tenía ella. Después de todo, su hermana no se había quedado embarazada a los diecisiete años de un amante misterioso cuyo nombre se negaba a revelar.
Cuando Billy se enteró de que estaba embarazada, le gritó, la
amenazó y le dio todo tipo de ultimátums, pero Miley no le dijo quién era el padre. No podía soportar decírselo a nadie… por distintas razones.
Y cuando Billy comprendió que no se lo diría nunca, la envió con su hermana Emma a San Antonio, como si vivieran todavía en la Edad Media y fuera una gran deshonra que su hija tuviera un niño sin estar casada.
Con el tiempo, Miley encontró la felicidad en San Antonio. Entró a
trabajar para Henry, se casó con él y Henry siempre trató a Jerry como a un hijo. Y aunque Miley no había vuelto mucho por Tate's Junction, su padre y ella habían hecho más o menos las paces.
Pero eso no quería decir que pudiera casarse con un hombre como él.
Ni en un millón de años.
Hannah, sin embargo, iba a hacer precisamente eso y parecía feliz.
A Miley, el amor de su hermana por el vendedor de coches le parecía una prueba más de lo muy distintas que eran. Miró de soslayo a los enamorados. Se llevó la mano de Hannah a los labios y Miley apartó la vista con pudor. Y en ese momento apareció Nick en el pasillo, directamente en su línea de visión. El corazón le dio un vuelco. Parpadeó.
Nick la vio… y le guiñó un ojo.
—Mamá —Jerry le dio con el codo—. Mira —susurró—. Es el hombre del perro. Nick.
—Sí —contestó ella, con una calma que no sentía—. Es Nick —lo
saludó con la mano. Él le devolvió el saludo y se alejó.
Miley lo siguió con la mirada, admirando a su pesar la amplitud de sus hombros y el modo orgulloso en que se movía. Se sentó en uno de los primeros bancos con su hermano Joe y Demi, la esposa de éste. La familia de ella también estaba allí: su madre, el marido de su madre, su abuela y un hombre alto y mayor al que Miley no reconoció.

Hasta aqi por hoy despues subo de las demas 

besitos las amo comenten mucho♥